lunes, 24 de mayo de 2010

La vida del profesor Víctor Cristóbal Pernía


“Muchos años después, frente a un bordón, el Profesor Víctor Pernía había de recordar aquella tarde remota en que su padre Efraín lo llevó a conocer al Santo Cristo de La Grita” - así comienza el maestro Víctor Pernía, su charla amena, parafraseando a uno de sus libros favoritos: Cien Años de Soledad. Oriundo de La Grita, hijo de Efraín Pernía Sánchez y María Felícitas Mora. Transcurrió su niñez en la Ciudad del Espíritu Santo—La Grita, o Humogría, como la llamaba su padre. Cursó la primaria en el Grupo Escolar “Padre Maya”, allí se deleitó con los juegos de metra y trompo, y en las tardes solariegas soñaba con un mundo que existía más allá de su pueblo. Empieza la secundaria en el Liceo Militar “Jáuregui”. Luego se traslada a San Cristóbal a estudiar en el Instituto “Alberto Adrianni”. Y regresa a La Grita a culminar el bachillerato en el Liceo “Ángel María Duque” en 1971. Obtiene en la Universidad de Los Andes el título de Licenciado en Educación. Mención: Orientación Educativa y Profesional en el año de 1977. Se casó con Alida Martínez, y con ella tuvo dos hijas: Elides y Eglis. En el año 2005 la Universidad de Pamplona - Colombia le entrega la certificación de: Especialización en Gestión Educativa. Empieza su labor docente en el Liceo “27 de junio” en Villabruzual - Turen—Portuguesa en 1978, dictando las cátedras de Filosofía y Castellano de 4º y 5º. En el año de 1983 se traslada al Táchira - San Cristóbal a los Liceos “Alberto Adrianni” y “Gonzalo Méndez”, desempeñándose en la cátedra de Formación Social, Moral y Cívica; Filosofía y Castellano y Literatura. Luego se concentra en el Liceo “Gonzalo Méndez”. Fue Jefe de Seccional y Subdirector Administrativo junto al Director Omar Contreras. Señala que se dejó la barba desde que leyó La Iliada y el Mío Cid.

¿Qué recuerdo le queda a su llegada al “Gonzalo Méndez”

- Era una institución un poco más sosegada, más tranquila que en la actualidad. La tremendura juvenil siempre ha estado, por su naturaleza. Había más unión entre los profesores por el vínculo deportivo que existía en las actividades docentes. Existía el Equipo de Sofball, Bolas Criollas masculinas y femeninas. El Club de los Amigos del Equipo de Sofball. Todas estas actividades eran acompañadas por la directora de aquel entonces, la profesora Mercedes Guerra. Las actividades culturales eran las que devenían del Ministerio. Recuerdo que se hacían Jornadas de Limpieza y Conservación de las áreas verdes y las aulas de la institución, donde participaban el Tren directivo, los profesores, el personal administrativo y obrero, el estudiantado y la comunidad educativa. Una anécdota que viene a mi memoria es que a todo aquel alumno que se le llamaba la atención por el cabello largo, la Directora Mercedes Guerra tenía unas tijeras en la Dirección y allí los llevaba y les cortaba el cabellos. Para aquella época existía un personal docente muy equitativo, recuerdo a Rosa Carrero, oriunda de Queniquea, ella daba Castellano. Orlando Zambrano, hombre de inquebrantable disciplina, daba Física. Al amigo José Albornoz, Director. A José de la Luz Chacón, apegado a la norma como el sólo, era muy estricto. A la bella Aura Zapata, la Orientadora, siempre tenía la palabra adecuaJefe de Seccional y daba Física. Didimo Suárez, agnegado a la naturaleza, era profesor de Agricultura. Al eterno amigo José Jesús Espinel por su chispa eléctrica. A Rafael Castellanos y Daniel Porras, virtuosos de la Biología. A Delia Uzcátegui y América Silva y su Método Palmer. Al amigo Julio Rincón y su responsabilidad con el reloj. A Rosalba Gallanti, gran amiga en la batalla de las ideas. A Claraybel Gómez, por su espiritualidad y cercanía con Dios. A Rosita Márquez y su buen humor. A Gilberto Márquez y su proceso de dar Educación Física. Y en las nuevas generaciones a Kenya Valero y Julio Ceballos.

¿Qué es para usted ser Educador?

- Es la profesión más digna para un ser humano, pues se encarga de enseñar a sus semejantes, ya que pasa a ser formador, orientador, guía. Es como aquel que talla una piedra y de el extrae una obra de arte.

Recuerdo que el maestro Prieto Figueroa decía: “Que la medicina y la educación, son las dos profesiones más bellas y a la vez más peligrosas, pues trabajan con materia humana”.

De allí la importancia de ser buen maestro, pues un maestro marca para bien o para mal. Soy de los que piensa que el maestro es el que enciende una luz para que otros se guíen, ya depende de sus enseñanzas si lo lleva por caminos de luz u oscuridad.

¿Qué necesita la nueva Escuela?

Creo que la nueva Escuela, desde la pedagogía, debe ahondar en los valores. Un consejo es que se recupere los valores fundamentales de todo ser humano: El respeto, la convivencia, la tolerancia, la moral y la ética, la amistad, pues estos son los pilares para crear buenas familias.

En mi juventud un libro me marco, fue “Venezuela Heroica” de Eduardo Blanco, porque ese es un libro que lo hace a uno estremecer en su espíritu patrio, esos momentos de lucha para construir el país en la independencia. Consideró que también se quiera la patria, enseñando la cultura e idiosincrasia venezolana.

Por ello los nuevos docentes deben aprovechar este momento sublime, como lo es ser educador, para que sus enseñanzas, sus predicas sirvan de luz a sus estudiantes y no sea una verborrea de tinieblas. Si es necesario enseñar con el silencio como en su momento histórico hizo el maestro Gallegos, el autor de ese bello libro llamado “Doña Bárbara”.

¿Qué significa para usted el Liceo “Gonzalo Méndez”

- El Liceo “Gonzalo Méndez” es una institución de la cual aprendí muchas cosas propias como docente y la que entregué mi pasión pedagógica, lo que uno poseyó para el bien de la juventud. Y si lo dijera con otras palabras, recurriría a las letras de Nino Bravo, aquella canción que dice:

“Esa será mi casa,

ese será mi hogar…”



RESEÑA HISTORICA DEL LICEO "GONZALO MÉNDEZ"

En el año 1969, el año en que el hombre pisaba la luna, en la ciudad de San Cristóbal, un número de jóvenes deseosos de estudiar para prepararse como futuro profesionales, se congregan y llevan su inquietud de crear un lugar para estudiar al jefe de la DREA, que para este momento era profesor José Miguel Vivas, quién vio con este movimiento la necesidad de agrupar a profesionales de la educación, personal administrativo y obrero, para crear un nuevo instituto de Educación Media, y de esta forma satisfacer la demanda de los San Cristobalenses. En esos días en la Escuela Técnica Industrial, por orden del Ministerio de Educación cierra el Ciclo Básico, cuando para esta época se requería más Centros Educativos, no que se redujeran. Así fue como se fundó en octubre de 1969 nuestro liceo con el nombre de ”CREACIONES LA ERMITA”, ocupando la dirección del mismo el Prof. Heli Mariño, y la subdirección el Prof. Pedro José Terán Terán. Así mismo un grupo de profesores como: Blanca Hernández (Castellano); Orlando Uribe y José de Jesús Hernández (Matemática); Fernando Márquez y Luís Herrera (Geografía Universal); Pedro José Terán (Formación Social, Moral y Cívica); Blanca Mujica y Olga de Arreaza (Inglés); Néstor Ramírez y Gilberto Márquez (Educación Física).

La inscripción de los estudiantes se realizó en el Grupo Escolar “Bustamante”, con la secretaria Gladys Duque, durante los meses de Septiembre- Diciembre. En el mes de Enero de 1970, empezó funcionar en la carrera 2 entre calles 13 y 14 (donde hoy se encuentra el IPAS-ME). Con el primer año bajó la Coordinación de la profesora Blanca Mojica y la secretaria Ramona Arias, y los segundos años con el profesor Jesús Díaz Duque y la secretaria Josefina González. Debido al incremento de estudiantes que existía en la Escuela Técnica Industrial, hubo la necesidad de transferir estudiantes de esta institución al liceo recién inaugurado, por lo que en el año escolar 1971 - 1972, se creó los terceros años bajó la Coordinación del profesor José de la Luz Chacón con las secretarias Carmen Moreno, y las áreas de exploración funcionaban en los talleres del Colegio Parroquial “Juan Bautista García” ubicado en la calle 14 entre carreras 4 y 5, bajó la Coordinación del profesor Carlos Paredes.

Para el año escolar 1970 – 1971 el liceo cuenta con los siguientes docentes en nómina: José de Jesús Bautista (Castellano), Orlando Uribe (Matemática), Pedro Mújica (Ciencias Biológicas), José Enrique Rivas (Geografía Universal), Gregorio Jesús Ramírez (Formación Social, Moral y Cívica), Guillermina de Serio (Inglés), Francisco Lara (Ciencias Biológicas), Pedro José Terán (Formación Social, Moral y Cívica), Jesús Padrón (Inglés), Bernardo Contreras (Inglés), Blanca Mújica (Inglés), Luís Herrera (Geografía Universal), Blanca Hernández (Castellano), Norberto Labrador (Matemática), Heli Mariño (Ciencias Biológicas y Educación Física), Eligio Villegas (Matemática), Juan Anduela (Ciencias Biológicas), Olga de Arreaza (Inglés), Gilberto Márquez (Educación Física), José de Jesús Hernández (Matemática), Néstor Ramírez (Educación Física), Fernando Márquez (Geografía Universal) y Ramón Bastardo (Educación Física). En el Personal Administrativo estaban: Gladys Duque de Fariña y Víctor Manuel Bautista. El Personal Obrero: Asunción Antuna y Antonia de Chacón. El Prof. Heli Mariño cumplió sus funciones con alta responsabilidad, manteniendo el Orden, la Disciplina, el Honor, la Rectitud, cuatro cimientos donde se fundamenta nuestra Institución. Al culminar su etapa de directivo, el Prof. Mariño siguió su labor pedagógica en la ciudad de Barquisimeto. En el año de 1973 según Resolución del Ministerio de Educación Nº 86 con fecha 5 de abril; recibió el nombre de “GONZALO MENDEZ” en honor de la excelente labor educativa de este ilustre profesor.

Ya con el nombre de Liceo “Gonzalo Méndez”, la dirección fue conducida por el profesor Felipe Guerrero, nativo también de la ciudad de la Grita, Estado Táchira, quién mantiene los cuatro cimientos y una magnifica sensibilidad a la paz laboral y la conciencia educativa, acompañado de un magnífico cuerpo de docentes quienes prestaron excelentes labores educativas. Debido al incremento de la matrícula estudiantil en este sector, surgió la idea de buscar un local más amplio, donde se albergara todas las áreas del conocimiento necesarias para este centro educativo. Así fue como la profesora Olga de Arreaza realizó algunas gestiones ante el Ministerio de Educación y organismos privados para la obtención de un terreno ubicado en el sector de Madre Juana, el cual fue donado por el Señor Carlos García Lozada, hombre filántropo e importante negociante, y de gran sensibilidad humana para esta ciudad de San Cristóbal. Gracias a la decisión del Ministerio de Educación se construyó un amplio centro educativo, el cual fue inaugurado en este sector, perteneciente a la Parroquia San Sebastián, por el Ex presidente Dr. Rafael Caldera en marzo de 1974. Después de varios años de Ciclo Básico por resolución del Ministerio de Educación paso a ser Ciclo Combinado y luego a Unidad Educativa Nacional y hoy en estos nuevos tiempos se adentra a ser el Liceo Bolivariano “GONZALO MENDEZ”. El Profesor Felipe Guerrero se desempeña como Director entre 1972 y 1978. En el año Escolar 1978 – 1979 es Directora encargada la Prof. Mercedes Guerra. Le sigue en la Dirección en el Año Escolar 1979 – 1980 el Prof. Víctor Díaz Quero. Pero ese año de 1980 asume la Dirección el Prof. José Adolfo Albornoz hasta el año de 1988. En la Subdirección estarán Mercedes Guerra y Carmen de Linares. Para este tiempo esta en nómina la Prof. Lolita Robles de Mora, quién debido a un accidente se debe retirar, pero que en este paso se hace una de las escritoras más importantes de la historia local del Táchira en el Siglo XX. La autora de las “Leyendas del Táchira” transitó estos pasillos de liceo y aquí nació el proyecto de escribir las leyendas del estado con el profesor Felipe Guerrero.

Para el Año Escolar 1984 – 1985 la nómina del plantel es la siguiente: Albornoz B. José Adolfo (Director), Guerra Picón, Ana Mercedes (Sub – directora), Zambrano de Linares, Carmen (Subdirectora), Boada Sánchez, Luís (Orientador), Cáceres, Laureano T.C., Carrero, Nelida T.C., Chacón, Gladis T.C., Chacón Méndez, José de la Luz T.C., Díaz Duque, Jesus T.C., García de Dávila, Olga T.C., Lara Vasquez, Francisco T.C., Maldonado Reina, Simon T.C., Mieles de Vivas, Olga T.C., Paredes, Carlos Augusto T.C., Pedraza Martínez, Wenceslada T.C., Porras Rodríguez, Daniel Enrique T.C., Robles de Mora, María Dolores T.C., Rueda de Pernía, Blanca T.C., Villegas Pérez, Eligio T.C., Zambrano Forero, Orlando T.C., Zambrano Rosales, María T.C., Zapata de Vitoria, Aura T.C., Angola de Mendoza, Eglée P.P.H., Aranguren de Sanguino, Ida., Bautista Rey, José., Bautista Vivas, Gladis., Becerra Barajas, Isidro., Campos Blanco, Josué., Castellanos Meneses, Rafael Gabino., Cárdenas de Roa, Fanny., Carpio, Julieta., Castro, Jesús Manuel., Coello Ceballo, Rafael Antonio., Contreras Agelvis, Hedí., Chacón, Rodolfo., Chacón, Rolando., Ferrer de Contreras, Rosalina., Hernández, Zulay., García, Deyanira., Gómez, María Josefina., Guerra, Marina., López, Yolanda., Márquez, Gilberto Arturo., Martínez, Miguel., Mogollon, Alba Rosa., Negrette, José Trinidad., Ostos, María Emilse., Padrón Pirela, Jesús., Perdomo Reyes, María Isabel., Pernía Mora, Víctor Cristóbal., Pérez Contreras, José Saúl., Pérez Parada, Ricardo., Perico, María Consuelo., Quintero, Leyda Fanny., Ramírez, Maura Consuelo., Rangel de Martínez, Magali., Rey de Pérez, Lucy., Rincón de Gallanty, Rosalba., Robles de Díaz, Ramona., Rodríguez, Deicy., Salcedo de Varela, Hilda., Sánchez Márquez, Nora., Silva Porras, América., Suárez Solano, Dídimo., Uribe Ramírez, Orlando., Useche Subdiaga, Alba., Uzcátegui, Juana Delia., Valbuena de Rangel, Deisy., Zambrano de Cañas, Luz Nora., Zambrano, Luís., Leal, Luz Estella., Silva de Rangel, Mercedes.

Es bueno señalar que con el transcurrir de todos estos años, después del Prof. José Adolfo Albornoz excelentes profesores fueron Directores: Ana Mercedes Guerra (1988 – 1996), el desempeño de esta profesora bajo la dirección se caracterizó por la disciplina fuerte, este período entra un tanto en la leyenda, me comentan que la profesora Mercedes Guerra era implacable con el horario, los obreros debían mantener los pisos como un espejo, los profesores debían esmerarse en su trabajo, llegando el caso de suspender a docentes. La era de Mercedes Guerra es añorada por los viejos docentes y su cohorte de apóstoles, son de esta época: Fanny de Roa, Deisy de Balvuena, América Silva, Claraybel Gómez, Eddy Contreras, Delia Uzcateguí, Rosalba Gallanti, Luz Nora Zambrano, entre otros.

A la Profesora Mercedes Guerra le siguió en la Dirección los profesores José de la Luz Chacón e Iris Barroeta para el periodo 1996 – 1997. Para el año escolar 1997 – 1998, tiempo en que llegué al plantel está en la dirección el Profesor Omar Contreras y en la subdirección los profesores Víctor Pernía y Aura Zapata, llego a la institución en reemplazo de la profesora Eddy Contreras. Para este año empiezan a jubilarse varios docentes de la vieja guardia. En este año recuerdo a los siguientes docentes: José Jesús Espinel, Jairo Martínez, Simón Maldonado, América Silva, Delia Uzcategui, Julio Rincón, Gloria González, Orlando Zambrano, Deisy Rangel, Yolanda Castillo, Consuelo Perico, Rafael Coello, Héctor Muñoz, Nallibe Torrelles, Gisela Valero, Julio Cárdenas, Gilberto Márquez, Miguel Martínez, Ludy Camargo, Leonel Granados, Gladis Bautista, Moraima de Duque, Paula Luna, Carmen Ruíz, Ivon Marín, Horacio Ramírez, a la secretaria Deisy Apolinar y Neida Martínez, entre otros. Alumnos de este tiempo que vienen a mi memoria: Karin Ocampo, Lady Camacho, Darwin Dávila, Nixón Garabito, Juan José Duque, Tahiri Chacón, Fátima de Abreu, Leonar Silva, Yeixon Narváez. En el año de 1999 llega al liceo la Prof. Leopoldina Araque a la Dirección y el y Prof. Adelfo Ceballos a la subdirección. Además llegan en el año 2000: Julio Ceballos y Kenya Valero; en el año 2001 Diego Pérez, Ángel Colmenares, Rafael Martínez, Yenni Castillo, entre otros.

En el año 2000 el Lcdo. Adelfo Ceballos llega a la Dirección con el Prof. Nelson Quintero en la subdirección. Se empieza con ellos una nueva gestión. Llega al Departamento de Control de Estudios y Evaluación: Marlene Guacaran, Julio Rincón, Gisela Valero, José Pulido, Paula luna, Neiva Aguilar. En el departamento de Orientación: Aura Zapata, Emeteria Arellano, Ivon Marin y Carmen Ruíz. En la Biblioteca. Blanca Rueda, Deisy de Rangel, Estefanía Zambrano. En las seccionales: Víctor Pernía, Gloria González, Gisela Valero, Darcy D` Santiago, Julio Ceballos. Como Coordinadores de Castellano: América Silva y José Pulido; Biología: Ivan Alirio Ramírez; Matemática: Claraybel Gómez.

Para el año escolar 2008 – 2009 está en la dirección el Lcdo. Adelfo Ceballos y en la subdirección las Licenciadas: Yenni Castillo y Briceida Suárez. La institución cuenta con 1.080 estudiantes repartidos en 35 secciones. Distribuidas desde primer año hasta quinto año, y con una nómina de 98 docentes profesionales, y un Personal Administrativo capacitado de 20 personas, asimismo un Personal Obrero de 19 personas, Comunidad de Padres y Representantes: Presidente, vicepresidente, tesoreros, vocales, entre otros. Consejos Comunales. 35 Voceros Estudiantiles. Que se caracterizan por la entrega a su trabajo y no es más que el de impartir educación de calidad para engrandecer a nuestra patria, continuando con el Orden, la Disciplina, el Honor, la Rectitud, los cuatro cimientos donde se fundamenta nuestra Institución.

Profesor Heli Mariño, primer Director (1969).


Profesor Felipe Guerrero (1972).


Profesor Víctor Díaz Quero (1979).


Profesor José Adolfo Albornoz (1980).


Profesora Ana Mercedes Guerra (1988).

Biblioteca "Don Simón Rodríguez" (1990).

Profesora Fanny de Roa y la Promoción de Bachilleres en Ciencias (1992).

 
Grupo de estudiantes jugando Voleibol  en el año 1992 a cargo del Profesor Miguel Martínez.
 
Estudiantes del año 1994.
Profesor Jose de la Luz Chacón, Blanca Rueda y Eligio Chacón. Triunvirato directivo de 1996.

Profesor Omar Contreras (1997).

Profesora Leopoldina Araque (1999).

Personal Docente Año 1999.

Profesor Adelfo Ceballos (2000).

BIOGRAFÍA DE GONZALO MÉNDEZ

José Gonzalo Méndez nació el 10 de enero de 1926, en la Atenas del Táchira, La Grita; la ciudad del Espíritu Santo. Ciudad que ha visto caminar en sus calles a personajes históricos como: Simón Bolívar, Francisco García de Hevia, Monseñor Jesús Manuel Jáuregui, Emilio Constantino Guerrero, Eleazar López Contreras, entre otros. Es por ello que Gonzalo Méndez ya estaba predestinado desde su nacimiento al arte del conocimiento.
El profesor Gonzalo Méndez, fue un excelente educador, incluso cabe en él, la palabra Maestro. Fue gremialista y político tachirense de renombre, pero estas actividades fueron secundarias, por encima estuvo su amor al arte de la enseñanza. Fue un hombre de una sólida educación intelectual y moral, y la política será un instrumento que él usara para el servicio de intereses nacionales. Gonzalo Méndez enseñaba de muchos modos, pero tenía una sola manera de comunicar su enseñanza: a través de un lenguaje sencillo, que por lo mismo de su sencillez llegaba hasta la limpia inquietud del alma de los niños. En palabras de Felipe Guerrero – “Gonzalo Méndez enseñaba un mensaje que se centralizaba en las buenas acciones que predicaba y practicaba; en el rechazo continuo a lo negativo que lo echaba junto a la escoba para que la vida lo barriera”. Sus mejores amigos siempre fueron los jóvenes y al igual que el poeta García Lorca, sus palabras expresaban más que los fusiles, con las que enfrentó los tiempos duros de la dictadura de Pérez Jiménez.
Él expresaba que los niños eran el futuro y todo futuro es vida, crecimiento desde la edad hasta los pasos para alcanzar la meta propuesta. Dice Felipe Guerrero que su oficio era alegre, pues fue un maestro de almas, conductor de siluetas de un paisaje en floresta, con niños de la patria, con los campesinos de la montaña y el páramo. Felipe Guerrero expresó: “La Universidad de un hombre se juzga por la medida de sus actos íntimos; si éstos se escuchan hacia fuera y no obscurecen sino que por el contrario dan claridad a las voces que transitan las callejas del mundo, decimos que su mensaje perdura. GONZALO MÉNDEZ continúa iluminando los senderos de la patria nueva, por eso tiene asegurada su universalidad”.

Gonzalo Méndez nació con el signo de la naturaleza creadora, caminó por las iluminadas galerías del conocimiento, penetró el camino de los filósofos. Y de esto es testimonio el Liceo “Simón Bolívar” y la Normal Valencillos, por donde dejó desperdigado su acción docente y pedagógica, en un contexto de tolerancia y comprensión humana. De igual manera colaboró con la Federación Venezolana de Maestros y el Colegio de Profesores de Venezuela, donde sembró las semillas para la defensa de los derechos de los docentes.

Diseminó la idea de fraternidad, igualdad y libertad en los gremios, la autonomía de las instituciones sindicales y del democrático pluralismo. Posición difícil la de sus pensamientos, si se toma en cuenta el momento que le tocó actuar, pero sus sueños han sido fecundados en distintos liceos del Táchira. Gonzalo Méndez asistió a la Convención Nacional de la Federación Venezolana de Maestros celebrada en el mes de agosto de 1964 conformando un calificado grupo de educadores cuya principal proposición era la de elevar el sueldo mensual de los maestros de Educación Primaria a Un Mil Bolívares. Este planteamiento no fue compartido por la mayoría de los Delegados de la Convención y a pesar de no haberse aprobado representó la justa vinculación de Gonzalo Méndez con los clamores y reclamos de los educadores venezolanos. Esta Convención se celebró en Guayana, en el mismo sitio donde Simón Bolívar en 1819 lanzará su mensaje inmortal de “Moral y luces son nuestras primeras necesidades”. Y en ese lugar, cuando se dirigían al famoso espacio conocido como la caída de “La Llovizna”, el puente por donde debían caminar la delegación de Táchira se rompió, lanzando al vacío a varios docentes, entre ellos el hijo de Gonzalo Méndez, éste sin pensarlo dos veces se lanzó detrás de su hijo, quizá también de sus sueños y alcanzó con ello el camino de la eternidad. Por ello hoy Gonzalo Méndez es eterno en el recuerdo de la institución que con honor lleva su nombre.